La memoria auditiva también conocida como memoria ecoica, es uno de los registros de la memoria sensorial. Este tipo de memoria sensorial es corta, pero resistente a las lesiones cerebrales.
La memoria auditiva o la memoria ecoica es un componente que constituye nuestra memoria sensorial y que está a cargo de toda la información auditiva a corto plazo que recibimos de nuestro entorno . Diversos estudios han señalado que este sistema puede almacenar una mayor cantidad de información durante un período de tiempo más largo (promedio de 3-4 segundos) que la memoria visual.
La memoria ecoica se compone de un área de almacenamiento de información auditiva de persistencia, grande, previamente categorizada y limitada.
Un estímulo sonoro irá automáticamente al procesador auditivo central, que se encarga de cambiar las señales eléctricas de los sonidos a conceptos mentales, creando un tipo de imagen sonora, que podemos usar y mantener en nuestro cerebro durante un corto período de tiempo. La imagen de sonido solo se puede reproducir durante el corto período de tiempo que sigue a los estímulos auditivos.
La memoria sensorial se mide en la corteza auditiva primaria. Esta área de almacenamiento de memoria auditiva se extiende a través de diferentes áreas del cerebro porque requiere usar diversos procesos. La mayoría de estas regiones cerebrales se encuentran en la corteza pre-frontal (PFC), que también es donde se controla el control ejecutivo y atencional.
Ejemplos de memoria auditiva o memoria ecoica.
- Recordar el nombre de alguien a quien acabas de conocer
- Recitar un número de teléfono que te dieron
- Recordar la dirección que te acaban de dar
- Escuchar la radio durante un concurso, recuerde la respuesta y llame al número para dar su respuesta.
- Recordar la voz de alguien
- Recordar una palabra
- Recordar uno o varios dígitos
Trastornos o patologías relacionadas con la memoria auditiva o déficits de procesamiento auditivo.
Las dificultades o problemas al procesar la memoria ecoica o auditiva están relacionadas con un trastorno del procesamiento del lenguaje , ya que generalmente los niños tendrán dificultades para repetir los sonidos y las palabras necesarias para adquirir el lenguaje. Además de estos déficits, a menudo está relacionado con problemas de lectura, Hipoacusia, TDAH, dislexia adquirida y discalculia. Los niños que tienen problemas con la memoria ecoica o auditiva generalmente tienen problemas para prestar atención y recordar la información que recibieron oralmente.
- Los niños con déficit de memoria auditiva tienen problemas con tareas que tienen múltiples pasos.
- Necesitan más tiempo para reconocer y procesar la información que han escuchado.
- El bajo rendimiento académico también puede estar relacionado con un procesamiento auditivo deficiente.
- Es común tener problemas de comportamiento. Los déficits en el procesamiento o la memoria auditiva pueden hacer que el niño se sienta frustrado y se sienta incompetente.
- Los niños con déficit de memoria de trabajo tienden a tener problemas de lenguaje (por ejemplo, pueden tener problemas para desarrollar su vocabulario, comprender el idioma, aprender un nuevo idioma…).
- Dificultades para deletrear una palabra, entender un texto, etc.
En adultos, podemos encontrar problemas de memoria auditiva en personas que han sufrido una lesión cerebral , traumatismo craneoencefálico con lesiones en la corteza dorsolateral – prefrontal y la corteza temporoparietal.
¿Es posible mejorar la memoria auditiva?
Absolutamente. La clave para mejorar la memoria auditiva consiste en mejorar la retención y el almacenamiento, ayudando a que sea lo más eficiente posible.
CEPAL tiene múltiples tipos de ejercicios clínicos para estimular y entrenar la memoria ecoica. Si la neurociencia nos ha mostrado algo sobre la plasticidad cerebral , es que cuanto más usamos un circuito neuronal, más fuerte se vuelve, lo que significa que los circuitos utilizados en el procesamiento auditivo también pueden mejorarse.
Con la evaluación neuropsicológica de CEPAL, mediremos la memoria auditiva y, en base a los resultados recopilados, creamos un programa de entrenamiento completo con ejercicios cognitivos personalizados diseñados para mejorar la memoria auditiva.
Solo se necesitan 15 minutos al día, 2-3 veces a la semana para estimular las habilidades cognitivas asociadas con la memoria auditiva.
Una batería de ejercicios clínicos ayuda a crear nuevas sinapsis y circuitos neuronales capaces de reorganizar y recuperar la función de sus dominios cognitivos más débiles, entre los cuales se encuentra la memoria auditiva.
